La estimulación sensorial es fundamental durante el primer año de vida para el desarrollo psicomotor de los bebés. A través de la estimulación de todos sus sistemas sensoriales, se busca que el pequeño alcance su autonomía y logre sus primeros hitos motores de manera natural y fluida. A continuación, te damos algunas pautas esenciales para fomentar un desarrollo psicomotor adecuado en esta etapa tan crucial.
¿Por qué es importante la estimulación sensorial?
El primer año de vida es una etapa en la que el cerebro de tu bebé está en pleno desarrollo. La estimulación sensorial permite que todos sus sistemas sensoriales —como el táctil, auditivo, visual y propioceptivo— se activen, lo que favorece la creación de conexiones neuronales. Estas conexiones son esenciales para el desarrollo psicomotor, es decir, para que el bebé aprenda a moverse, agarrar objetos, hablar y explorar su entorno.
Pautas para estimular el desarrollo psicomotor durante el primer año
1. El suelo es su mejor aliado
Durante el primer año, es crucial que tu bebé pase tiempo en el suelo, siempre que sea posible. Esto no solo le ayuda a desarrollar fuerza en los músculos, sino que también fomenta el movimiento libre y la exploración de su entorno. No tengas miedo de acompañarlo en el suelo; este contacto cercano también fomenta el vínculo afectivo.
2. Descalzo en casa
Deja que tu bebé camine descalzo siempre que pueda. Caminar sin zapatos en casa le permitirá desarrollar mejor la percepción de su cuerpo y fortalecer sus pies. Además, es importante saber que los virus no entran por los pies, por lo que esta práctica es completamente segura.

3. Ropa ligera = más percepción y movimiento
La ropa ligera permite que tu bebé se mueva con mayor libertad y perciba mejor las sensaciones de su entorno. Menos ropa significa más contacto con el suelo, lo que favorece el desarrollo de habilidades motoras finas y gruesas.
4. Eliminación de peligros y libertad para explorar
A medida que tu bebé adquiera habilidades de movimiento, elimínale los peligros del suelo y deja que explore. La exploración autónoma es clave para que desarrolle sus habilidades motoras y de percepción.
5. Comunicación constante
Hablarle y gesticularle frecuentemente es esencial para el desarrollo del lenguaje. Habla y gesticula cerca de tu bebé para estimular su sistema auditivo y visual. Esta comunicación también refuerza la relación afectiva y el apego.
6. Juguetes adecuados
Con los recién nacidos, los juguetes no necesitan ser demasiado coloridos. Es más importante que tengan un buen sonido, ya que esto estimula el sistema auditivo del bebé. A medida que crezca, podrás adaptar los juguetes para estimular también el sistema visual.
7. Movimiento constante
El porteo es una excelente forma de estimular el desarrollo psicomotor, ya que mantiene al bebé cerca de ti mientras favorece su movimiento. No existe un límite para dejar de portear, el tamaño y peso del bebé marcarán el momento adecuado. También puedes moverlo en diferentes direcciones mientras lo portas para activar su percepción del movimiento.
8. Tummy time: esencial desde el nacimiento
El tummy time o tiempo boca abajo es crucial para el desarrollo de los músculos del cuello y la espalda. Empieza desde el nacimiento de forma progresiva y siempre bajo vigilancia. Esto ayuda a tu bebé a fortalecer su musculatura y a preparar su cuerpo para futuros hitos motores como el gateo y el caminar.

9. Estimulación orofacial
Para favorecer el desarrollo de los músculos orales, acariciar suavemente la carita de tu bebé también es fundamental. Estimula su musculatura orofacial para preparar su sistema para hablar y comer más adelante.
10. Piel con piel (método canguro)
El contacto directo de piel con piel desde el inicio es esencial para el bienestar emocional y físico del bebé. Este tipo de contacto fomenta el desarrollo psicomotor, mejora la regulación térmica y refuerza el vínculo afectivo.

11. Objetos con diferentes texturas
Cuando tu bebé sea capaz de agarrar objetos de forma voluntaria, ofrécele juguetes de diferentes texturas y tamaños. Esto no solo estimula su sentido del tacto, sino que también le ayuda a desarrollar la destreza manual.
12. Masaje corporal
Realiza un masaje suave en todo su cuerpo con un poco de presión para ayudar a relajar sus músculos y mejorar la circulación. Intenta hacerlo en momentos de calma para que el bebé se sienta relajado y receptivo.
13. Movimiento libre: fomenta la autonomía
A medida que tu bebé alcanza hitos motores como el rodar, gatear o caminar, es importante permitirle moverse libremente. No lo ayudes por completo; simplemente mantente cerca para motivarlo y vigilarlo mientras explora su capacidad de moverse.
14. Evita excesivos accesorios
No uses demasiados accesorios o herramientas como hamaquitas o cojines sin un objetivo claro. El movimiento libre es fundamental para que tu bebé desarrolle su propio control motor.
La estimulación sensorial y el desarrollo psicomotor en el primer año de vida son fundamentales para el crecimiento físico, emocional y cognitivo de tu bebé. Ofrecer un ambiente que favorezca el movimiento libre, la exploración y el contacto cercano con los cuidadores ayudará a tu pequeño a alcanzar su autonomía de manera saludable. ¡Disfruta cada momento de este proceso tan maravilloso!